miércoles, 17 de mayo de 2017





Texto y foto de Paolo Barosso

El sábado 13 de mayo de 2017 en la Iglesia del Corpus Domini situada en Turin, ligada al milagro eucarístico acaecido en la capital sabauda el 6 de junio de 1453, tuvo lugar una ceremonia religiosa de gran significado para la comunidad cristiana de Turin y del Piamonte.

Por iniciativa del movimiento cultural Rinnovamento nella Tradizione – Croce Reale, presidido por Fabrizio Nucera Giampaolo, y con la participación de la asociación cultural Gioventura Piemonteisa, se celebro una Santa Misa para recordar el centésimo aniversario de la primer aparición de la Virgen de Fatima en Portugal el 13 de mayo de 1917 y seguida de otras cinco apariciones marianas que se verificaron a distancia de un mes una de otra hasta completarse el 13 de octubre del mismo año.

La ceremonia ha conmemorado un evento extraordinario que además de concernir todo el ‘900, siglo de tribulaciones y sufrimientos para la Europa Cristiana y para la Iglesia Catolica, no ha todavía finalizado su contenido profetico, como ha declarado el Papa Benedicto XVI. En el curso del Sagrado Rito se ha invocado la protección mariana sobre Piamonte y sobre los territorios de los antiguos estados de la Saboya, y también hacia los miembros del movimiento Rinnovamento nella Tradizione, promotor de la iniciativa, y sobre la asociación Gioventura Piemonteisa.



No es casual y fue elegida para ambientar la ceremonia religiosa la Iglesia del Corpus Domini, entre las mas significativas de la geografía sacra de Turin. El edificio fue erigido por voluntad de los Sindacos de Turin después de la peste del 1958, con trabajos que se llevaron desde el 1604 al 1613, en el area donde ya estaba edificado con diseño de Matteo Sanmicheli, un oratorio del ‘500, mas precisamente del 1528, conmemorativo del celebre milagro eucarístico. La nueva Iglesia, que vio la intervención de los arquitectos del calibre de Ascanio Vitozzi, Carlo di Castellmonte, Benedetto Alfieri, sirviendo a la memoria del milagro de aquel 6 de junio de 1453, que hizo merecer a Turin el apelativo de Ciudad del Santisimo Sacramento. Una placa marmórea, señalada por un enrejado de hierro decorado, evoca un epígrafe en latin en el punto exacto donde según la tradición y los testimonios, se verificio dicho evento sobrenatural.



Nota de Traditio :

La Hostia Consagrada, robada ad Exiles en Valsusa, a mano de ladrones sacrílegos, que la sustrajeron del tabernáculo de la iglesia hizo que se librara en el aire una : luminosa a guisa di sole, es decir quedo suspendida en el aire maravillando a los fieles.



http://www.piemonteis.org

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