El 14 de julio fue la infame "toma de la Bastilla", que ya no era una cárcel en el sentido literal de la palabra, era más bien desde hacía años como una prisión light para personas pudientes. Ese día se encontraban sólo 7 detenidos: dos locos, cuatro falsificadores de billetes y un adolescente aristócrata detenido a petición de su padre. Las masas fueron azuzadas para ir por las armas ya que ese lugar también era un depósito. La turba mató a los prisioneros, sí a los siete, y a los soldados que eran veteranos -ancianos y algunos inválidos- que custodiaban el lugar, eran muy pocos y por supuesto, asesinaron al alcaide, cuando ya les habían prometido dejarlos ir. Al estar al descubierto la basura Francesa se les echó encima y no dejó uno vivo. Ese fue el comienzo, despedazando los cadáveres y arrastrando en triunfo las cabezas y restos por todo París. De ahí fue el pan de todos los días. A todos los presos de todas las cárceles en París, se les asesinó de la forma más cruel. No liberaron ni uno solo como nos han contado siempre los gobiernos republicanos, un ejemplo la Masacre de los Prisioneros d'Orléans
(Noches de París.- Restiff de la Bretonne).
Napoleón dijo: "La vanidad fué lo que causó la revolución. La libertad fue sólo un pretexto"
Traducción y versión aumentada: Créditos a quien corresponda
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