El emperador Maximiliano y su esposa la emperatriz Carlota fueron los primeros gobernantes en preocuparse por los niños mexicanos. Mientras que el emperador decretó la prohibición del trabajo infantil y la educación básica y obligatoria la emperatriz Carlota fundó las primeras casas de maternidad en todo el Imperio, donde las mujeres solteras embarazadas podían ser atendidas en sus partos y posteriormente si así lo deseaban dejar ahí al bebé para adopción sin hacerles ningún tipo de cuestionamiento, de ésta forma se evitaron muertes de mujeres por abortos clandestinos o por parir en condiciones deplorables y así se salvó la vida de muchas mujeres y también de muchos niños.
Todos éstos avances se anularon por decreto del presidente Juárez.
Texto cedido gentilmente por la Casa de Habsburgo Lorena en México : https://www.facebook.com/CasaDeHabsburgoMX/
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